Nada es mejor que la prevención

Comenzar un nuevo año es buen momento para pensar en nuestra salud, ¿hace cuándo no nos hacemos un chequeo médico?


Desde que estamos en el vientre nos sometemos a chequeos periódicos, sea para controlar nuestra talla y peso, hacernos estudios o aplicarnos vacunas… Pero con el tiempo dejamos de darles prioridad a estos, como si fuéramos inmunes, y solo acudimos al médico en caso de estar enfermos.

No olvidemos que hay muchas enfermedades que no se detectan con rapidez, más aún si tenemos alguna tendencia a desarrollar una. La prevención puede ser nuestra arma más grande para diagnosticarlas a tiempo y llegar a una vejez sana.

El análisis básico debe contener las cifras de glucosa, colesterol, creatina, defensas y hemoglobina (para descartar una posible anemia). Dependiendo de los resultados se pueden indicar otra serie de pruebas complementarias. También hay que revisar la historia clínica y un electrocardiograma.

Según la edad hay ciertos controles que no debemos descuidar:

Adolescencia y veintena

-Niveles de colesterol en la sangre

-Si somos activos sexualmente, la prueba del VIH, para descartar cualquier posibilidad.

-Tensión arterial.

-En mujeres de más de 25 años la citología cervical cada tres años.

-Ginecología para un correcto control de natalidad.

De 30 a 40 años:

-Pruebas y exploraciones

-Tratamiento de enfermedades con antecedentes familiares

-Citología para descartar el cáncer de cérvix

-Posible detección del virus de papiloma humano (VPH)

-Consultar con un dermatólogo posibles alteraciones cutáneas, revisar los lunares y sus formas regulares o irregulares.

A partir de 50 años

-Prestar atención al cáncer de colon con el control de las heces.

-Detección de factores de riesgo cardiovascular, la hipertensión es muy común a esa edad.

-Control del colesterol y glucemia cada cinco años.

-Las mamografías tanto en hombres como mujeres.

-El examen antígeno prostático para hombres.

-Chequeo dental anual.

60 años en adelante

-Cuidado en ejercicios físicos y caídas.

-Vacunación y contraindicaciones.

-Exámenes mentales: Memoria, orientación y limitaciones sensoriales o físicas.

-Chequeo de visión cada dos años.


Cuidémonos y a nuestra familia, no dejemos que nada se agrave en último momento ni menos cuando ya es tarde, los controles son la mejor prevención un diagnóstico temprano puede salvar vidas. Apuntémoslo como nuestra meta 2020.

39

Años

80

Productos en el Mercado

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Millones de Tratamientos Exitosos

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